Como dice Daniel Pennac, el verbo leer no soporta el imperativo, Aversión que comparte con otros verbos: el verbo "amar"..., el verbo "soñar"...
Claro que siempre se puede intentar. Adelante. "¡Ámame!" "¡Sueña!" "¡Lee!" ¡Pero lee de una vez, te ordeno que leas, caramba!"